La fundación de la ciudad de Tlaxcala en la época colonial, estuvo determinada por la calidad de la tierra y el acceso al agua, las cuales permitieron el establecimiento de la manufactura textil que se convertiría en la actividad esencial para el desarrollo económico del estado.
Entre 1876 y 1901 se establecieron las primeras fábricas textiles en zonas cercanas a las vías férreas y donde había ríos. Algunos de los municipios en los que se establecieron fueron Xicoténcatl, Santa Cruz Tlaxcala y Amaxac de Guerrero. En este sentido, para finales del siglo XIX se consolidó el sistema industrial de Tlaxcala que se mantiene hasta la fecha.
Santa Ana Chiautempan se convirtió en el municipio más importante en la producción textil, abandonando paulatinamente la producción artesanal para cambiar la variedad de sus productos, desde telas, cobijas, colchas y ropa, hasta trabajos para la industria automotriz.
Las fábricas textiles no solo se establecieron en Tlaxcala, sino que también en el estado de Puebla a la orilla del río Atoyac. La industria junto con el aumento de la población, provocaron mayor demanda del agua y su contaminación.
El agua es muy importante para la industria textil porque permite los procesos de teñido y lavado en los que se utilizan grandes cantidades de agua y varias sustancias químicas difíciles de degradar, generando así agua residual que deteriora la calidad del agua en ambos estados.
Las aguas residuales son la principal causa de contaminación del agua en Puebla y Tlaxcala, los daños que provoca son la pérdida de la biodiversidad y efectos negativos en la salud pública. Las enfermedades que presentan los pobladores a causa de la contaminación del río Atoyac son anemia, insuficiencia renal y leucemia.
“La falta de tratamiento de aguas residuales de la industria textil es un problema ambiental al que no se le ha dado atención, ya que muchos colorantes y aditivos textiles son tóxicos, no biodegradables y son descargados a canales y ríos”.
En este sentido, la contaminación del río Atoyac se debe a que la industria con tal de ahorrar costos, no da el tratamiento adecuado a las aguas residuales que vierte en el río. A pesar de que existen normas ambientales en los que se establecen los parámetros de calidad para las aguas residuales, no se contempla el parámetro sobre toxicidad en la normatividad mexicana, por lo que su definición podría evitar la mala calidad del agua y así proteger la salud de la población.
Para tomar en cuenta
La falta de tratamiento de aguas residuales de la industria textil es un problema ambiental.
Referencias Bibliográficas
Rosales Ortega, Rocío (2003). Tlaxcala, ¿un distrito industrial? Sociológica, 18(51),131-163. [fecha de Consulta 16 de octubre de 2021]. ISSN: 0187-0173. Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?id=305026632006https://repositorioinstitucional.buap.mx/handle/20.500.12371/7620